lunes, 25 de noviembre de 2013

el mar :


no me llamará
el mar

cada vez que
se le revuelvan
sus olas.

ya no
porque en su
tempestad

ya no hay cantos
solamente escucho
un silencio en mi interior y
allí solo está presente



y solamente
existe la
triste canción
del viento.

Y yo estaré entonces
en una
alejada orilla
dormida


tomando el sol
ajena
a todos sus
lamentos
una vez más.

4 comentarios:

  1. El mar nos atrae por su inmensidad.
    Besos
    Mavi

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  2. Que bonito te quedo el poema Amapola.

    A mi el mar no me gusta mucho por una experiencia bien fea que me paso cerca a el y todavia debo entrar a terapia para superarlo jajaja, pero sobrevivi y poco a poco toy superando ese episodio.

    Saludos.

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